miércoles, 3 de diciembre de 2008

Un amor que no fue II

Llegó a mi vida casi sin que me diera cuenta. Un día de Agosto como cualquier otro, llegué tarde al colegio, me metí en el aula y me sente.
"Viste al nuevo?" me pregunto M. "Ah no, mira vos. Este es el que echaron no?". Si, creo que sí. Es horrible". "Yo le doy".
Fue eso, nada más. Las primeras semanas apenas cruce palabra con él. Y de la nada, un jueves entró en mi vida. Se sentó en el banco de adelante y no paró de hablarme. Charlabamos, jodiamos, jugábamos. Con él me pasaba las mañanas, nos cagábamos de risa, y nadie nos aguantaba.
Después de un mes de idas y vueltas ya me había enamorado. Pero yo sabía que tenía novia y no pensaba hacer nada. Hasta que un sabado pasó lo que tenía que pasar.
"Estas en Cool?" me mandó por sms. "Sí, en la pista grande". A los dos minutos estaba al lado mío. Charlamos un rato y nos besamos muy inocentemente. Desde ese día que no pude dejar de pensar en él.
Los siguientes días los pasé pegada a él. A todos lados íbamos juntos, hablamos por telefono todos los días, y me acompañaba a mi casa todos los mediodías. Así estuvimos semanas, juntos. Yo esperaba con ansías ese viaje a una estancía que haríamos con el colegio, esperaba viajar con él.
Pero de un día para el otro, sin darme ninguna explicación, dejó de hablarme. Ya no se sentaba conmigo, no me acompañaba a mi casa, no me mandaba el beso de las buenas noches por sms, ya nada. Y yo, por hacerme la fuerte como siempre, no dije nada. Hice como si nada pasara y seguí mi vida, muerta de angustía.
Después me enteré que había dejado de hablarme porque la novia se había enterado de lo nuestro, y se vió obligado a dejarme. Me puso peor todavía.
Pasaron los meses, terminaron las clases. Y así como se fue sin que lo echen, volvió sin que lo llamaran. Vino a mi casa, comimos, charlamos, y yo caí de nuevo en su trampa. No llegamos a nada, porque desapareció nuevamente a las dos semanas, y yo con la promesa de un verano lejos de él, traté de olvidarlo.
No pude, volvi de mis vacaciones, empecé las clases, y ahí seguía él, en el mismo aula que yo, y en mi corazón.
Con las vueltas de la vida, para junio de este año casi volvemos a estar juntos, pero gracías a Dios justo antes de que eso pasara a mi me internaron y a él lo echaron del colegio. Supongo que la virgencita no permitió que yo volviera a sufrir, aunque sea no por el momento.
Pasó un mes, y volvió al ataque con los sms. Y yo como toda mujer enamorada, se los contestaba. Terminé una noche en un pub con él, diciendole que lo amaba y que quería estar con él, y por supuesto no obtuve respuesta. Esa misma noche lo saqué de mi ama a través del llanto. Llore horas hasta que me dormí en mi angustía.
Es el día de hoy que a veces me lo cruzo por la calle, y nos saludamos como si nada. Pero cada vez que lo veo, me invade esa sensación de tristeza mezclada con todo el amor que siento por él. Porque aunque se que lo nuestro nunca va a poder ser, todavía me queda ese sinsabor de un amor no correspondido.



No pensaba hablar de G hoy, porque esta historía ya es conocida en el blog, pero el otro día una conversación con A me hizo recordar todo lo que pasé, y no lo pude evitar.
Es que cuando A me pregunto por el hombre de mi vida no pude contestar otro cosa que "El hombre de mi vida es aquel al que más ame, y más me hizo sufrir en mi vida, G"

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Me pasó lo mismo. Me senti muy identificada, por lo menos una de las dos, pudo mostrar madurez y dejar atras todo, no seguirlo y saludarlo, poderlo ver.

Gracias por escribirlo.

Florencia dijo...

si entendere responder sms por estar locamente enamorada y dejar en ellos el orgullooo

vamos a decirlo
el amor no correspondido, es un asco.
pero haber sido correspondida y después dejar de serlo,
es peor!

Anónimo dijo...

No es por nada, pero puedo asegurarte que un tiempo, los dos mas grandes y con mas mañas, van a encontrarse.
Esas son las historias de idas y vueltas que uno recién entiende cuando termina, y hasta donde leí, esta no terminó.

(perdón si esto te pone triste, no es la intención).

Un saludo:)

Araceli dijo...

Itzia: Realmente me hace muy bien bajar lo que me pasa a este blog, y mejor todavia es recibir estas señales de apoyo que me dan ustedes.
Yo te agradezco a vos, por leerme.
Isadora: Cada mensaje de texto que mande me carcomia un poquito el alma. Creo que G fue la persona con la que más me humille.
Penelope: Por más que me pese, hace bastante ya me di cuenta que lo que decis es verdad. Sobre todo porque tenemos muchos amigos en común y frecuentamos los mismos lugares. Por ahora, cada vez que lo veo salgo corriendo, no estoy preparada todavia.