domingo, 14 de diciembre de 2008

Que alguien por favor me explique

El viernes tuve la fiesta de egresados de una amiga, y tipo cuatro me fui para seven con Maru y Flor para ver a Juan Manuel, ya que el chiquito vive en ese boliche.
Llegamos, y nos encontramos con nuestros compañeros del colegio. Facu, Leandro, L, y un par màs andaban dando vueltas por ahi.
Esa noche no tuvo desperdicio, fue un conjunto de bizarreadas y sorpresas que hizo que llegara a mi casa pasadas las 8 con una sonrisa inborrable y un dedo supuestamente fracturado.
Ya de entrada Flor me piso con su taco aguja el dedo ìndice del pie y me lo dejó morado.
Cuando lo vi a Facu, le pregunte por Juan Manuel y me dijo que estaba castigado (estoy meada por un elefante enorme). Después se me acercó y me comentó que estaba saliendo otra vez con L, sin compromisos, muy tranquilos. "Esto no lo sabe nadie, te lo cuento a vos porque sos la única mina en que confío". Otra vez lo emotivo con Facu, terminó en un abrazo.
Después aparecio L. Me vino a decir que ella ya no estaba enojada conmigo por haber estado con Facu en el verano, y que no queria llevarse mal conmigo (?). Yo ya no entendía nada para esas alturas, sumado con el alcohol que tenía encima, me estaba descostillando de la risa.
Salimos del boliche con Maru y la vereda de ese lugar era un espectáculo. Facu y L a los gritos pelados peleandose, Leandro tirado en la calle hablando solo, y Maru hablando por teléfono con Ma, el amor de su vida.
No me pregunten como, pero terminé en el auto de Ma, con Maru y Leandro yendo para el consultorio de la madre de Leandro. La idea era que Maru pudiera hablar con Ma, porque el tipo la reboludea y ella se hartó.
Cuestión que en el consultorio, me tuve que llevar a Leandro a un cuarto para dejarlos solos, y Leandro termino tirándose encima mío, y yo buscando excusas para poder irme de ahí. Pero la más increible fue que en tipo me hablara de lo que había pasado hace unos años entre nosotros. "Quedate tranquila que no vamos a terminar como la otra vez, eso fue mi culpa y te pido disculpas".
Gracias a Dios y a Maria santísima justo cuanto estaba por responderle, entra Maru llorando y nos tuvimos que ir.
Llegué a mi casa y dormi sin pensar en nada, pero ayer cuando me desperté recapitulé un poco y quedé medio perdida. Yo no entiendo nada.

1 comentario:

Florencia dijo...

Ah buenoo
Vos tuviste una de esas noches que yo califico como: bizarriiiiiiiisimas al cubo
jaja

No me vendria mal una noche para reirme un poco del drama ajeno..