Disculpas baratas y un Mc tostado

El jueves salimos tempranito del colegio asique con Agus y Flor aprovechamos para agarrarla a Maru de las mechas y sentarla en un Mc Donalds y tirarle toda la mierda que teníamos guardada.
Pudimos arreglar nuestros conflictos, y ya somos amigas de vuelta.
Agus fue quien llevó adelante la conversación y le dijo de todo, pero TODO. Yo, como era de esperarse, no le reclame que no haya estado cuando salí del quirofano medio drogada gritando por ella, ni que no haya venido a mi cumpleaños. Pero entre nosotras dos las cosas son distintas, nos pedimos disculpas con la mirada, con una palmadita en la espalda y ya esta tod bien.
Obviamente, Maru sigue siendo la misma dominada de siempre y dijo que ni en pedo deja una noche al gordo ese para salir con nosotras; aunque admitió que nos mintió descaradamente cuando se iba de viaje con él.