miércoles, 26 de agosto de 2009

Epifania

Hoy, mientras volvía sola en el subte (Micompañero me cagó) me de algo que hago inconcientemente.
Cada vez que estoy mal por algún tipo, o bajoneada, o me siento sola y triste, me dan ganas de hablar con G.
Es como un autoflagelo psicológico. En vez de no comer, o tajearme los brazos, yo tengo que hablar con G para que no me de pelota, o me diga alguna estupidez que me deje pensando una semana, o simplemente no me diga nada.
Porque de todo lo impredecible de mi vida, tengo una constante que se mantiene fija, y es el maltrato y la indiferencia de G.

Y hoy, venía en el subte de mal humor, conjeturando estupideces sobre Micompañero y su comportamiento errático, cuando me dieron ganas de mandarle un sms a G.
Y ahí me di cuenta, no quiero hablar con él, ni verlo. Quiero algo que yo pueda saber como va a terminar, aunque eso me haga mierda.

4 comentarios:

Tararira dijo...

mujeressssssssss!

Florencia dijo...

Es mal general eh, te suena The Ex?

Lo peor es que aunque nosotras exageremos todo y ba blabla:
la verdad es que no nos mueve un pelo.

Al menos yo, estoy acostumbradisima, tanto que me juega en contra porque:
"ante un nuevo dolor, busco el que ya conozco y sé manejar; o no, pero sé que lo puedo pasar"

Beso Ara
Cuidate :)

Sharma dijo...

No pude evitar notar que entre las etiquetas de tu blog "G" figura 43 veces...

Araceli dijo...

Tara: no seas malo, no creo que toooodas seamos así.

Isa:viste? parece joda, pero mierda que somos complicadas.

Sharma: Es que G fue un personaje nefasto, que mereció varios posts.


Un beso!